Rabietas

Son las 7 a.m y es complicado escribir tecleando despacio para no hacer demasiado ruido y que se despierten papá y mamá. Es un momento en el que puedo escribir porque una vez despiertos, es prácticamente imposible.

Últimamente veo a los dos algo tristes, como si no supieran que hacer. La verdad es que ha habido días que he tenido rabietas porque no me ha gustado lo que había para comer, no quería ponerme la ropa que me elegía mamá, etc. Eran rabietas relativamente breves. Conseguían tranquilizarme dándome un abrazo y besitos.

Pero ahora, las rabietas a veces se alargan demasiado e incluso de tanto llorar y gritar, a veces parece que vaya a ahogarme. Dos de ellas por ejemplo fueron en la playa y en Mercadona.

La de Mercadona obligó a mamá a sacarme del super y dejar a papá solo comprando. De hecho luego cuando papá salió, me vió casi morado y con dificultad para respirar. Todo esto fué porque yo quería coger cesta para hacer la compra y papá y mamá no porque solo íbamos a comprar un par de cosas. Entrar y salir como dicen ellos.

La de la playa es la más reciente y fue una tarde que fuimos con mi tía y mi prima. A mi prima la quiero mucho pero, tampoco saben porque, cuando nos íbamos a casa ella me tenía que llevar por la pasarela fuera de la playa, y empecé a gritar que no quería, que quería que me sacase mamá (esto no podía ser porque mi tía y mi mamá iban cargadas con las bolsas, toallas y sillas). Mamá lo pasó fatal porque pensó que mi comportamiento podía dar lugar a que la gente pensase que me estaban raptando o algo peor.

Todas estas situaciones han hecho que papá y mamá estén tristes porque se ven superados, porque ven que  los abracitos y los besitos ya no «sirven», y eso me pone triste. También reconozco que todos dicen que en estas edades esas rabietas son normales, pero aunque lo sean, no me gusta ver a papá y mamá así

Vaya parece que papá se ha levantado y quiere escribir algo. Os dejo con él.

Solo quería comentar una cosa. El otro día estaba en el baño haciendo mis necesidades y Jordi entró a lavarse las manos. Es muy alto y ya llega el solo al lavabo. Me dijo: «papá ya soy mayor y llego yo solo». Yo le dije con lágrimas en los ojos: «Jordi no crezcas, se siempre así. ¿Para que quieres crecer y hacerte mayor?». Él me contestó: «para poder cuidaros». Me quedé helado y cada vez que recuerdo eso se me saltan las lágrimas, como ahora mismo.

Bueno, un saludo a todos/as y en especial a todos los blogueros y blogueras que en ese momento de bajón me animasteis y me disteis consejos. Gracias de corazón

pataleta